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El pasado fin de semana, los enanos desempolvaron la máscara del lobo feroz. El enano nº 3 decidió dos cosas:
- tenía el pelo y la barba demasiado largos
- las canas no le sentaban bien
Solución: cortarle el pelo. Todo es mucho más fácil si dentro de la máscara hay alguien. El enano nº2, siempre dispuesto a ayudar, acudió raudo y veloz.
Preparativos:

Igualito que en la peluquería (pero hay que sujetarle la boca al lobo, no vaya a ser que muerda...).
Concentración máxima:

De pronto, caperucita rosa aparece. ¡Puf! ¡Menuda tontería! leemos en su cara. Mutis por el foro.

Resultado:

Con la "suerte" de que no le va a crecer más. Tiemblo de pensar lo que se les ocurrirá la próxima vez...
4 comentarios:
miércoles, 09 junio, 2010
¡¡¡JA JAJJA!!!
Pero tus niños aún no saben que Caperucita está prohibida por la Ministra?
miércoles, 09 junio, 2010
Bueno, pero como los peluqueros eran niños... a lo mejor cuela. Por si acaso, que no se entere.
Besos
jueves, 10 junio, 2010
Lo que no se le ocurra a esos dos..
Simpatico reportaje
Besos
viernes, 11 junio, 2010
A veces se les ocurren buenas ideas, otras veces hay que temblar... pero simpáticos son siempre.
Besos
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