martes, 5 de octubre de 2010

Arcoiris

18 comentarios
Imprime esta entrada Estaba yo esta mañana lavándome los dientes, paseando por la casa porque yo hago una ronda mientras me lavo los dientes cuando me topé con un arcoiris. Completo. En mi ventana. ¡Qué bonito es el cielo en otoño!

Con esta imagen nada puede salir mal, puede una pensar. Sin embargo fue un día más como el anterior: mucho trabajo, comida, fútbol, cena, blog. No me llegó el combustible para ir al gimnasio.

Necesito organizarme. Esto no puede seguir así. Organizar la cena en el último momento sin ingredientes es misión imposible. Ha llegado el momento de planear mis días... así el arcoiris podrá cumplir su cometido.

18 comentarios:

Mery Jane says:
martes, 05 octubre, 2010

pero cómo?¿No piensas la cena con antelación?
Yo no sólo planifico las comidas con antelación, sino que suelo hacer de más y congelarlo, así cuando no me apetezca cocinar y tenga el congelador a rebosar, descongelo y ya está, gggg.

Es cuestión de organizarse, no para que te dé tiempo a hacerlo todo a la vez, sino para poder hacerlo con orden sin agobios, dejando para mañana lo que no puedas hacer hoy y ya está.

Besinos

cia says:
martes, 05 octubre, 2010

Una cocinera como tú,seguro que prepara una cena estupenda hasta cuando está apurada.
A mi,el revueltito de gambas ,trigueros y ajetes,me saca de mas de un apuro ;)

LaCuarent says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Yo nunca planifico ni cena ni almuerzo ni naaa, pero ¿tu?, eso no me lo esperaba jajaja
Un beso
Ah! el arcoiris fantástico

MAMUMA says:
miércoles, 06 octubre, 2010

hay que organizarse,conguito

MAMUMA says:
miércoles, 06 octubre, 2010

hay que organizarse,conguito

Una pulga más says:
miércoles, 06 octubre, 2010

pués...soy la reina de la improvisación, no me gusta planificar nada, siempre voy a salto de mata, en fin, sin caer en la rutina, creo que al menos un poquito de orden viene bien, pero no en todo eh? sino dónde queda la emoción de lo imprevisto?, la imaginación del último momento?
bsines

Una pulga más says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Preciosa fotografía!!!!!

Luis says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Ya veo que se te da tan bien la fotografía como la cocina... felicidades Congui... muy buena la foto... Besis

Ana H.H. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Esto pasa hasta en las mejores familias, MJ. Como dijo aquel: nobody's perfect.

Me tomo tu consejo al pie de la letra: voy a confeccionar una lista de alimentos que tenemos que tener siempre en casa.

Besos

Ana H.H. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Lo del revuelto suena muy bien, Cia, toy salivando. Yo quería pedir una pizza para cenar, pero Ironman bajó a comprar unos tomates para la ensalada y me obligó a hacer una tortilla de atún.

¿Has mirado el correo?

Besos

Ana H.H. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Hubo un tiempo, Cuaren, en que confeccionaba sobre el papel los menúes de la semana, hacía la compra acorde a ello. Mi vida fluía sin altibajos. Luego llegaron los enanos, uno detrás de otro, el trabajo, el furgol, las tareas del cole, los años (que no perdonan) el blog... y todo el castillo de perfección se vino abajo.

Será cuestión de llamarse al orden.

El arcoiris era verdaderamente bonito, aún más al principio, pero entre que saqué la cámara, le metí la tarjeta de memoria (que por supuesto no estaba dentro) enfoqué... ya se había diluído un poco.

Besos

Ana H.H. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

MAMUMA, a eso se le llama poner el dedo en la llaga (y remover un poco).

Besos

Ana H.H. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Ya Pulguilla, si queda hasta romántico, pero cuando tienes tres fieras hambrientas y un Ironman que alimentar, la cosa cambia.

Lo que más me dolió fue el agotamiento, físico y mental. Es que no pude ir ni a sudar al gimnasio! con lo que me gusta.

Todos deberíamos tener un arcoiris en una caja para sacarlo de vez en cuando a alegrarnos el día. A falta de esto, una foto.

Besos

Ana H.H. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Gracias, Luis! ¡Me gusta que vean en mí más que una fábrica de galletas!

Besos

Madrina E. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

La foto me encanta aunque el cielo en otoño no tanto, me deprime un poco, ya sabes, cuestión de gustos...
Creo que yo no puedo darte consejos de organización porque no conozco a nadie que haga tantas cosas a lo largo de un día como tú y eso quiere decir que tan mal organizada no estarás. Además, ¿a quién no le ha pasado alguna vez no tener nada en casa para preparar la cena? Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra....
Animo Conguito!
Besos.
E.

Ana H.H. says:
miércoles, 06 octubre, 2010

A mí del otoño me gusta octubre, E. Aún no hace mucho frío y viene cargadito de regalos. Los bosques se ponen de colores y el cielo, incluso cuando viene cargado de nubes y lluvia, está claro.

Ahora me voy a hacer un pisto de berenjena para la cena de las fieras.

Besos

Mery Jane says:
miércoles, 06 octubre, 2010

Tómatelo con calma.Mi madre tuvo una fiera más a la mesa, que era mi güela, que comía como una lima, y también se agobiaba un montón.
Hasta que la convencí de que DEBÍA llevar reloj y planificarse ordenadamente con las tareas,eso sí, ayudó mucho la colaboración de l@s fier@s.

Ya, ya sé lo que piensas..."cuando sea madre, comeré huevos"...lo sé, lo sé, soy consciente.

Ana H.H. says:
jueves, 07 octubre, 2010

No, MJ, si yo no me agobio. Simplemente, cuando una se rebela contra su destino empleando más tiempo del que tiene en la vida contemplativa, luego le coge la cornada.

El organizarse es una inversión a medio plazo y viene muy bien, suelo hacerlo, pero a veces mi vagancia me puede.

Los enanos colaboran, que para eso viven aquí, pero ya sabes que repartir tareas es lo más agotador que hay (y hacer que las cumplan), por eso a los directivos y ejecutivos se les paga más que a los curritos.

Ahora que la marcha del curso está imparable, he recargado pilas y me las he puesto. Tengo para una temporadita.

Besos