Érase una vez, hace muchos años, me compré una libreta para apuntar las recetas que mi madre hacía. Me iba de casa y no quería vivir sin su cocina. Esta es una de esas recetas, croquetas caseras. Me ha costado varios años de ensayo y error llegar al nivel de mi maestra. Al fin lo he conseguido. Lo que nunca voy a conseguir es no pringarme, como mi abuela Antonia. Sólo le vi una vez, pero era capaz de darles a todas la misma forma y el mismo tamaño y no mancharse ni una uña. Era un artista.Croquetas de pollo de mi madre
Unas 26 medianas
Ingredientes:
- Medio pollo asado, y su salsa
- 4 cucharadas harina
- 2 dientes ajo, grandes
- 1 cucharadita colmada sal gorda
- 1/2 litro leche
- 3 cucharadas aceite oliva
- pan rallado y huevo para rebozar
- abundante aceite de oliva para freír
- Deshuesa el pollo, retira y descarta piel y huesos. Desmigaja la carne de pollo con los dedos.
- Pela los ajos y májalos en el mortero junto con la sal. Reserva.
- En una sarten grande, pon el aceite. Cuando esté caliente, añade el pollo y su jugo.
- Tras un par de minutos, añade la harina. Deja que se dore.
- Incorpora de golpe la leche, siempre removiendo.
- Añade el ajo con la sal.
- Deja que se cuezca a fuego lento. Debe formarse una masa bastante sólida, para poder darles forma. Cuando esto ocurra, retira del fuego y deja que se enfríe.
- Pon abundante pan rallado en un cuenco y bate dos huevos en otro. Forma las croquetas con una cuchara, o con las manos. Yo siempre empiezo con las cucharas, luego pierdo la paciencia y acabo con las manos. Moja cada croqueta primero en el huevo y luego en el pan rallado. Reserva en un plato.
- Pon bastante aceite en una sartén profunda, o una freídora si tienes una a calentar a fuego mediano-fuerte.
- Cuando el aceite comience a humear, fríe las croquetas.
- Sirve caliente.

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