¡Qué día fantástico hemos tenido hoy! De esos días al principio de otoño, claros, con sol y el aire un poco fresco. Después de hacer los deberes, cogimos las bicicletas y nos fuimos a comer a Caces.Caces está después de las Caldas, a unos 9 kilómetros deOviedo. Es un paseo muy bonito y podemos hacerlo sin necesidad de coger el coche. Salimos un poco tarde, así que tuvimos que darnos prisa para coger sitio en el restaurante y sólo pude hacer fotos en el regreso. Era casi todo a contraluz ¡qué se le va a hacer!
Nosotros siempre vamos al restaurante Senda, aparcamos las bicis en el prao que hay atrás, y comemos en la terraza. La comida es sencilla pero sabrosa y los postres caseros muy buenos. Entre plato y plato los niños juegan a la pelota o escalan un árbol o nos dan una lección magistral sobre el móvil y sus posibilidades...
De vuelta se ve el castillo de Priorio, un día de estos tenemos que visitarlo.
Luego viene Las Caldas, donde el balneario restaurado ha quedado impresionante.
El campo de golf y después a El Aula de la Naturaleza La Manjoya, que antes era una estación de Feve.
Ranas y niños se observan mutuamente....El paisaje es verdaderamente bonito, relajante. A veces hay que atravesar un tunel o dos, en los que hace bastante frío...
La enana nº 3, en un ataque hormonal debido a su incipiente adolescencia, se aleja de nosotros.
Por fin, casi en casa, una última mirada al Parque de invierno...
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