sábado, 20 de marzo de 2010

Bratkartoffeln mit Wurst

8 comentarios
Imprime esta entrada Cada vez que voy a Alemania, no dejo de asombrarme de la cantidad de maneras que tienen de preparar las patatas. Inevitablemente me pregunto, qué comerían los alemanes antes de descubrir lo ricas que son las patatas. Supongo que nabos. Es comprensible que se pasaran a la patata. No sólo las comen fritas, sino en ensalada, calientes, frías, en puré y de miles de formas diferentes. Los alemanes no pueden renunciar a tres alimentos. El pan de centeno, la cerveza y las patatas. No pueden vivir sin ellas. Para ilustrarlo os cuento una anécdota.

Una vez que mis suegros vinieron a visitarnos, cometí la torpeza de no ofrecer patatas dos días seguidos. Al tercero, tocaba. Mi suegra exclamó:

- Endlich Katorffeln, H.! (¡Por fin patatas, H.!)

No volví a torturarla... ahora siempre hay patatas.

Esta es una de mis recetas favoritas. Leo en mi libro de cocina alemana que tiene su origen en el norte, zona de Hamburgo y Schleswig-Holstein. Bueno, como el gazpacho aquí. Hace tiempo que las Bratkartoffeln se comen por toda la geografía alemana y, claro, partes de la española, porque una vez que las probéis no hay vuelta atrás. A mi juicio les dan mil vueltas a las patatas fritas. Juzgad por vosotros mismos.

Bratkartoffeln

Ingredientes:
dos raciones
  • 2 patatas cocidas y completamente frías
  • media cebolla
  • 100 gr. panceta ahumada, cortada en trocitos (opcional)
  • grasa, la que más nos guste: aceite, manteca de cerdo, mantequilla. Yo usé la que resultó del magret de pato.
Método:
  1. Corta las patatas en lascas, ni muy finas, ni muy gruesas.
  2. Corta la cebolla en tiras finas.
  3. Dora la panceta. Cuando esté dorada, añade un poco de grasa. Incorpora patatas y cebolla. La grasa tiene que estar muy caliente, para que las aptatas se doren sin empaparse de grasa.
  4. Deja que se dore a fuego mediano alto, sin tocarlas. Cuanto menos se manipulen, mejor. Cuando estén bien doradas por un lado, se les da la vuelta, con cuidado que no se rompan.
  5. Corregir el punto de sal y añadir pimienta si se quiere.
  6. Servir caliente, acompañado salchichas, hamburguesas...

8 comentarios:

Ana María Hernáez says:
lunes, 22 marzo, 2010

En este momento me comería una buena ración de ese plato. Debe estar muy rico..
Besos

Ana H.H. says:
lunes, 22 marzo, 2010

Yo también, Impasse, yo también... y sí, estaba muy muy rico.
Besos

Zulima says:
lunes, 22 marzo, 2010

Antes de leer tu entrada, sólo viendo la fotografía pensé: "Alemania=salchicha... pero a mi me gustan más las patatas que la acompañan...". Mira por dónde, de eso iba tu entrada...vamos, que en este caso, la salchicha es el "acompañante", no es de extrañar orque las patatas tienen una pinta estupenda.

Un besote, mi solete.

Vamosalculete.

Ana H.H. says:
lunes, 22 marzo, 2010

¡Ah, Fartuquina! Alemania es mucho más que salchichas: tartas de cebolla, repollo relleno, codillo con choucrout, postres de frutas, ensaladas agridulces, estofados de caza...

Esta manera de preparar las patatas es fantástica. Has de probarlo.

Besos

Guille says:
lunes, 22 marzo, 2010

Comida, comida, comida...
Mañana os pongo el brebaje de mi desayuno y lo triste que es mi vida buaaahh!!!!

Ana H.H. says:
martes, 23 marzo, 2010

Ánimo, ánimo, ánimo. El tiempo pasa inexorablemente.
Besos

Madrina E. says:
martes, 23 marzo, 2010

Probaremos sin duda esas patatas. Supongo que serán menos pesadas que las fritas al llevar menos aceite... Me encantan las patatas y además, en contra de lo que cree mucha gente son muy buenas para la salud.
Besos.
E.

Ana H.H. says:
martes, 23 marzo, 2010

Sí, Madrina, son menos pesadas de comer, pero más pesadas de hacer. Lo importante es que las patatas estén completamente frías (sino absorverán más grasa y se romperán más fácilmente) y que la grasa esté muy caliente.
A mí me gustan más sin panceta, ya me contarás.
Besos